¿Cuál es el secreto para tener unas vacaciones libres de estrés y regresar descansado?
– Si de verdad te preocupa tu trabajo toma vacaciones regularmente: es necesario tener un descanso periódico, que permita la recuperación de nuestro cuerpo, en especial de nuestro cerebro. Esto resulta fundamental cuando además hemos sufrido un período de alta exigencia (como el fin de año), de esta forma preservamos nuestra salud mental y evitamos el riesgos de presentar cuadros ansiosos o depresivos secundarios a estrés mantenido en el tiempo.
– Prepara tu desconección: “nadie es indispensable”, delega las tareas esenciales en diferentes miembros de tu equipo y define los pasos a seguir en caso de que se presente una emergencia inesperada. No olvides dejar programado el mail de respuesta automática que indique a quién se le están redireccionando o copiando tus correos durante este período.
– Suelta el control: no solamente es necesario delegar tus tareas, también es importante que confíes en tu equipo y tus colegas, debes tener la certeza de que realizarán el trabajo tan bien como tú(en ocasiones puede ser incluso mejor).
– Deja lo proyectos atrás: nunca lleves trabajo para vacaciones. Recuerda que las vacaciones son “una obligación” para tu cerebro y las únicas tareas permitidas en este período son disfrutar y flojear; de otra forma no lograrás uno de los principales objetivos de las vacaciones: regresar con tu cerebro descansado y recargado para un largo año laboral.
– Desconéctate: lo ideal es dejar de lado absolutamente el mail, pero si tu ansiedad es demasiado intensa -y llega a ser un problema- puedes reservar un momento del día, cuando no interrumpa la dinámica de tus vacaciones, para revisarlo (solo como una medida anti crisis de pánico); pero sin responderlos , ya que responderlos te involucra en una cadena de comunicación que tendrás que seguir (además responder mails desde la distancia y apresuradamente puede ser peor que no responderlos).
– Prepara tu regreso: no agendes reuniones a tu regreso, reserva ese día para revisar y responder mails, recibir las tareas delegadas y realizar llamadas telefónicas.
– Saborea tus vacaciones: prolonga los recuerdos de tus vacaciones durante unos días, revisa las fotos, recuerda las anécdotas con tu familia y amigos. Esto te permitirá extender la sensación de bienestar y desconexión durante más tiempo.
Adaptado por la Dra. Claudia Barrera Renault, Médico Psiquiatra y Gerente General de Cetep, de Harvard Business Review, Carolyn O´Hara, agosto 14-2014