La esquizofrenia es una enfermedad que tiene como uno de sus rasgos característicos la presencia de déficit en el funcionamiento social e interpersonal, siendo estos elementos claves para la vinculación social dentro de la comunidad.
En el contexto del taller socio recreativo en el Centro de Rehabilitación Psicosocial de Clínica MirAndes, se creó una terapia con el objetivo de potenciar las habilidades sociales de los usuarios a través de una actividad que permitiera la vinculación social con la comunidad.
La jefa de Hospital de Día y Centro de Rehabilitación Psicosocial MirAndes, Nancy Aguilera, manifestó que “este tipo de actividades permite que nuestros usuarios y usuarias participen en actividades contextualizadas dentro de la comunidad, haciéndolos parte de ésta, algo fundamental cuando hablamos de procesos de rehabilitación psicosocial”.
La terapeuta ocupacional en formación, Hilda Riquelme, explicó que “se trabajan las y los usuarios diferentes habilidades, como la expresión corporal y oral, para luego proponerles realizar una presentación de una obra de títeres para los niños y niñas de un jardín infantil, cercano al centro. Pensé que los usuarios se asustarían con la actividad, sin embargo, se mostraron dispuestos a participar, incluso es importante destacar que la obra de títeres presentada, fue escrita por uno de los usuarios hace un tiempo atrás, quien decide ponerla al servicio del grupo, para que comenzáramos a darle vida a esta historia”
Hugo, el usuario que facilitó su obra para ser representada por el grupo, explicó que había escrito la obra, y se le ocurrió luego de jugar con su hija. E indicó que le gustó que desde MirAndes los incentivaran a realizar este tipo de actividades, “porque nos ayuda a tener un sentido de realidad en cuanto al otro. Con los niños, como fue en este caso. Eso a uno lo aterriza. Y saber bien donde está parado”.
Hilda Riquelme, agregó que “se observó que los usuarios se comprometieron con la actividad, organizándose para realizar las diferente tareas que implicaba llevarla a cabo, como por ejemplo, la construcción de la escenográfica, los ensayo de libretos, lo que implico que se juntaran en horarios fuera del establecido, fortaleciendo relaciones entre ellos, mejorando el dialogo y sus destrezas comunicativas”.
Berenice, una de las usuarias que participó manejando a un títere de hipopótamo bailarín que “incentivaba a los niños a aceptarse a sí mismos, a ser seguros y a fomentar la creatividad”, explicó que “fue un reto muy entretenido. Nos ayudó para sumarnos a otros contextos y trabajar en grupo. La respuesta de los niños fue un regalo muy bonito. Y nos unió más como equipo. Practicamos, nos reímos harto, estábamos ansiosos, conversamos mucho, ensayamos harto”
“A pesar de que esta sociedad está llena de prejuicios y estigmas hacia las personas con esquizofrenia, la actitud y disposición del jardín, fue totalmente distinta a lo esperado, ya que desde un principio tuvimos un buen recibimiento a la propuesta planteada. Estuvieron dispuestos a abrirnos las puertas para poder llevar a cabo esta actividad, en dondelos usuarios habían puesto toda su energía, motivación y compromiso, consiguiendo realizar una presentación exitosa,en la que tanto los niños y las niñas como los usuarios pudieron disfrutar. Creemos que así se puede ir dando un paso a la inclusión, empoderando a las y los usuarios como sujetos de derechos, para que estos mismos sean los que derriben estos prejuicios y estigmas impuestos por la sociedad”, sentenció Hilda Riquelme.
De esta forma, los usuarios lograron establecer un vínculo con sus vecinos, creando una relación de cooperación mutua, en donde pudieron beneficiarse de esta a experiencia través de la potencialidad de sus habilidades sociales y, los niños y niñas pudieron recibir una enseñanza de forma lúdica en su contexto educativo.
Para más información sobre el centro de Rehabilitación Psicosocial MirAndes haga clic aquí