El sobrepeso, la obesidad y los problemas de salud derivados de estas condiciones pueden afectar a individuos de todas las edades, nivel socioeconómico y cultura. En los últimos años, la prevalencia de los problemas de salud asociados al sobrepeso y malos hábitos alimentarios han experimentado un progresivo aumento, pronosticándose la mantención de esta tendencia para las próximas décadas
Este empeoramiento de la calidad de vida causado por el sobrepeso y la obesidad se debe, entre otros, al aumento de patologías de Salud Mental, tales como los trastornos anímicos, trastornos de ansiedad, abuso de sustancias, etc. De forma importante, pacientes con patología mental están sometidos también a diversos factores que favorecen el sobrepeso y la obesidad, incluyendo factores propios de la enfermedad, como también el creciente uso de nuevos fármacos en que el aumento de peso es un efecto secundario frecuente y eventualmente grave.
En relación al tratamiento de la obesidad, el abordaje médico ha mostrado altas tasas de recaídas, especialmente si los pacientes no son tratados de manera multidisciplinaria. De esa forma, la cirugía para la obesidad, cirugía bariátrica iniciada en los años 80`s, se ha posicionado como una alternativa para los pacientes en que el tratamiento médico no es suficiente.
Sin embargo, independiente del tratamiento elegido, la evaluación y apoyo de salud mental es fundamental en el manejo integral de la obesidad. Por un lado el adecuado manejo de trastornos anímicos y ansiosos influye en la adecuada pérdida de peso; mientras que la mejoría del peso influye positivamente en aspectos como el ánimo, la ansiedad y la autoestima.
Investigaciones recientes han mostrado que en algunos pacientes la ingesta aumentada de comida no responde sólo a una mala dieta, si no que tiene un comportamiento compulsivo, con importante dificultad para detenerse a pesar de su efecto deletéreo en nuestro cuerpo. En este sentido es comparable, tanto conductual como neurobiológicamente, a una adicción.
Otro aspecto a evaluar por el profesional de salud mental es la presencia de trastornos de la conducta alimentaria. Entre estos los más conocidos son la anorexia, caracterizada por el miedo patológico a aumentar de peso; la bulimia que consta de atracones de comida (comer sin control) y conductas purgativas compensatorias (vomitar, laxantes, ejercicio); y el trastorno pro atracón, que es similar a la bulimia pero sin conductas purgativas. Actualmente sabemos que la mayoría de los pacientes tiene síntomas de los tres trastornos y deben ser manejados de manera integral por un equipo médico-psiquiátrico y psicológico.
En conclusión vemos que la salud mental y la obesidad están íntimamente relacionadas influyéndose ambas, lo que obliga a tener una evaluación completa y multidisciplinaria de estos pacientes.
Autor: Dr. Tomás León. Médico Psiquiatra Adultos, Pontificia Universidad Católica de Chile. En nuestro Centro de Atención Clínica encontrará a los mejores profesionales. Puede reservar o realizar consultas en los teléfonos 22784 0838 / 22784 0839 o al mail contacto@cetep.cl